Ya sabes que el jamón ibérico no necesita refrigeración para conservarlo y que la temperatura ideal de consumo está en torno a los 22º C. ¿Pero qué ocurre en verano que en España esa temperatura la sobrepasamos con creces? No te preocupes, no se va a poner malo si sigues las pautas que te voy a explicar a continuación, lo único que tienes que hacer es ser más cuidadoso.
El jamón ibérico y el calor
Para serte sincero, el exceso de temperatura no es el mejor aliado del jamón, por ello siempre se recomienda, incluso en invierno, mantenerlo alejado de fuentes de calor que puedan haber en casa y donde no le dé el sol directo que pueda entrar por la ventana.
No hace falta que tengas una bodega o un sótano. En la cocina, simplemente manteniendo el jamón ibérico en un lugar fresco, es suficiente.
Lo que ocurre con temperaturas altas es que la carne, y sobre todo si es de un jamón de bellota ibérico, va a sudar, a soltar la grasa, con lo que se va a deshidratar mucho más rápido y a endurecer antes.
Consejos de conservación del jamón en verano
Lo que te recomiendo es comerlo más rápido de lo habitual. Lo ideal es que todos los días vayas cortando un poco de jamón de la pata o a la hora de comprar jamón, que sea una pieza más pequeña.
Lo que también ocurre al perder la grasa debido al calor, es que vas a perder potencia de sabor. Recuerda que lo que le da ese potente sabor, aromas y esa textura jugosa al jamón ibérico es su grasa infiltrada; al perderla, vamos a perder también esas características.
Pero no te alarmes. Ponlo siempre alejado de la ventana, a la sombra y cúbrelo con un paño de algodón para que pueda respirar. El film alimentario es verano no te lo recomiendo, ya que va a hacer que sude más.
Tú que sigues nuestro blog de jamón, ya tienes claro que en casa, donde un jamón nos va durar algunas semanas, lo mejor es empezarlo por la parte más estrecha, es decir, con la pezuña hacia abajo, que es la parte más seca.
Conforme vayas quitando la grasa de tocino de los lados, úsala para tapar el corte de la pieza y que no se oxide y pueda mantenerse hidratada y jugosa.
Alternativas al jamón ibérico en pata
Una opción muy viable es que en esta época, si no eres como nosotros que estamos a todas horas comiendo jamón ibérico, compres el jamón ibérico loncheado o deshuesado. Como viene envasado al vacío en las dos opciones, puedes meterlo en el frigorífico sin problemas, de hecho es recomendado hacerlo, a no ser que estemos en invierno.
Tan solo recuerda sacarlo de frío 30 minutos antes de su consumo para que coja temperatura y exprese todos sus maravillosos atributos.
Dónde comprar jamón ibérico en verano
En nuestra tienda online de jamones, te mandamos los jamones directamente desde los productores, donde los jamones reposan en salas naturales en zonas geográficas con altidud donde la temperatura y la humedad es la ideal.
Así que disfruta de un buen jamón ibérico aunque estés de vacaciones en la playa. Tan solo sé un poco más cuidadoso.